Acompañados por un experto del equipo de Tubertini y dos jóvenes ayudantes, comienza la sesión de pesca de hoy, una pesca boloñesa desde el barco, con la intención de capturar varias especies de peces en una zona poco profunda. El truco es cebar mucho el área de pesca.
El experto utilizará el engodo Tubertini Mare Nostrum, engodo ideal para la dorada, el mújol, la lubina y la oblada, y hará bolas, ideales para la desintegración lenta en el fondo, con la intención de atraer especialmente a las lubinas y a los mújoles.
Para hacer un engodo infalible primero hay que poner la harina en una palangana, poco a poco añadir agua para no correr el riesgo de añadir demasiado, mezclar con una cuchara o cucharón hasta que se seque lo suficiente.
Cuando el día es muy caluroso, será necesario humedecerlo de vez en cuando. Esta mezcla le permitirá crear bolas muy estrechas, que serán lanzadas al agua, a unos 12/15 metros del barco, cubriendo un área bastante grande.
Como cebo se utilizará el pan francés, la trenza de pan, el camarón rubio o más normalmente llamado "camarón rosado", ideal para anzuelar pequeños trozos, y finalmente los gusanos.
El verdadero protagonista de la sesión es la caña Tubertini R18 Ultra Slim, en la longitud de 6 metros, joya de la casa Tubertini, acompañada por el nuevo carrete Aryas, muy compacto, ligero y equilibrado, con pomo de corcho de excelente acabado.
Caña muy fina, ligera, pero al mismo tiempo rígida y robusta. La evolución de la R18 radica en la innovación de las resinas que, combinadas con el tejido de carbono, permiten obtener un peso específico un 30% menor, con mayor rigidez y potencia que las resinas tradicionales.
Las primeras capturas de la sesión son obladas de tamaño discreto, doradas, sargos y lubinas que se desanzuelan y se liberan en el agua. Aumentar el tamaño de la presa es un anzuelado consistente de pulpa de camarón en un anzuelo de 12 VLP, montaje muy atractivo especialmente para doradas y lubinas.
Algunas presas necesitan ser sacadas y el experto recomienda la sacadera Mono de Tubertini, una cabeza muy ligera con una red de monofilamento de malla media ancha, disponible en dos tamaños.
Muchos toques, muchos peces capturados y devueltos al mar. El atractivo ha echado de menos tantos peces hermosos como mújoles, que suelen aparecer en las aguas claras como las del lugar de hoy.
La aventura fue emocionante y los consejos sobre el cebado fueron muy valiosos. ¡Nos vemos la próxima vez, amigos!